Los test genéticos de ancestros proporcionan información sobre el posible origen de los antepasados del individuo que se realiza el análisis genético. Para ello se compara el material genético de la persona con el de poblaciones de referencia que presentan un origen geográfico y etnicidad conocidos.
Con un examen genético se pueden conocer multitud de aspectos que los genes dicen de cada persona, entre ellos los ancestros. El estudio de los antepasados de los genes humanos es un proceso continuo y acumulativo, a medida que aumenta el número de poblaciones estudiadas, también aumentará el conocimiento sobre eventos pasados.

En un test de ADN en el que se estudien los ancestros, se analizan ciertos patrones de la variación genética de una persona y se compara con una base de datos de personas con un origen étnico y geográfico conocido. Aquellas variaciones que sean comunes, determinarán el porcentaje de sus genes que descienden de esa población.
Es importante conocer de dónde vienen nuestros genes, ya que se ha demostrado en diversos estudios que muchas de las condiciones de salud o vulnerabilidad de los individuos o poblaciones a ciertas patologías o a agentes infecciosos están condicionadas por la ancestralidad de los genes.
Para conocer de dónde vienen los genes de una persona hay que realizar un test genético o de ADN que incluya los ancestros. El test de ADN de tellmeGen muestra la ancestría de los genes, además de otros muchos aspectos. Para determinar la ancestralidad, se utiliza una fracción relevante de los datos obtenidos en el genotipado correspondiente al ADN autosómico. Esta fracción se compara con miles de individuos distribuidos en 70 grupos étnicos, cuya información está en bases de datos públicas.
El informe muestra, en tanto por ciento, la asignación que se realiza de la composición genética en los diferentes grupos étnicos considerados, organizados por su localización geográfica. De manera general se cumple que aquellas poblaciones más próximas geográficamente presentan mayores afinidades genéticas.
En definitiva, las pruebas de ancestralidad genética permiten a aquellas personas interesadas en su historia familiar obtener información complementaria a la que podrían encontrar a través de sus familiares o en la documentación histórica.
Examinar las variaciones del ADN puede proporcionar pistas sobre el origen de los antepasados de una persona. Ciertos patrones de variación genética a menudo se comparten entre personas con un origen particular y esto proporciona una información muy valiosa que, con solo una muestra de saliva para el test genético, se puede obtener fácilmente.